Tener un cuerpo que nos guste y nos haga sentir bien con nosotras mismas no es una tarea sencilla, y llegar a nuestro peso ideal es algo complicado si no tenemos constancia ni buenos hábitos alimenticios. Y todo esto se complica aún más si consideramos factores como tener un hijo o comer de más en fechas especiales.
Para volver a tonificar tu cuerpo, prueba con lo siguiente.
ALIMENTACIÓN
Llevar una dieta balanceada es básico, cada alimento en los distintos momentos del día es importante para que tu organismo funcione correctamente. Integrar algo de esto te será de gran ayuda:
Melón – Tiene propiedades diuréticas y también ayuda a que tu cuerpo se deshaga de lo que no necesita.
Piña – Entre sus múltiples propiedades está la de contener una enzima llamada bromelina, que es excelente para mejorar la digestión.
Verduras – Son fáciles de digerir y contienen vitaminas y minerales indispensables para ayudar a que su organismo funcione correctamente.
Almendras - Ayudan a reducir la absorción de azúcar al organismo, lo que es ideal para disminuir los riesgos de diabetes e inflamación.
Proteína animal - También conocidas como “proteínas de primera clase”, éstas contienen la cantidad adecuada de aminoácidos esenciales para mantener y reparar los tejidos, sintetizar enzimas, hormonas, polipéptidos y ciertos neurotransmisores, igualmente para la formación de pelo, piel y uñas. Se calcula que en una dieta mixta, la cantidad de proteína a consumir diariamente debe ser de 0,8 gramos por cada kilo que pesemos.
EJERCICIO
Una rutina de ejercicio adecuada es el complemento perfecto para que, junto con la dieta correcta, logres recuperar tu figura.
Plank - Trabajas todo tu cuerpo y hacerlo es sencillo. La posición es similar a cuando haces lagartijas pero debes sostener tu peso en los antebrazos. Flexiona los brazos, mantén tus codos a la altura de los hombros y tu cuerpo recto. Comienza con 30 segundos y ve aumentando el tiempo poco a poco conforme te vayas acostumbrando.
Bicicleta – Recuéstate sobre tu espalda, coloca tus manos detrás de la cabeza y mueve tu rodilla izquierda hacia tu pecho mientras levantas un poco tu hombro izquierdo. Regresa a la posición inicial y repite lo mismo pero con tu otra pierna mientras alzas un poco tu hombro derecho.
La “L” – Recuéstate y coloca tus manos detrás de la cabeza, junta tus piernas y elévalas completamente hasta que todo tu cuerpo forme una L. Mantén esa posición, cruza las piernas y contrae tu abdomen mientras elevas ligeramente tus hombros del suelo. Ve aumentando el número de repeticiones conforme sientas que aumenta tu resistencia.